Friki-G@lletas de mantequilla

Friki-G@lletas de mantequilla.

El pasado 25 de mayo fue el día del Orgullo Friki. Escoger este día para la celebración no es casualidad, ya que coincide con el aniversario del estreno de La guerra de las galaxias, una de las joyas de la corona del movimiento friki. La palabra, que viene del inglés freak, es definida por la RAE como “persona que  practica desmesurada y obsesivamente una afición”. Según dicha definición, puede haber frikis de muchas cosas, desde la informática, películas y series de ciencia-ficción hasta… la cocina.  Aquí, el que esté libre de ser un friki, que levante su espada láser.  De hecho, hoy en día, pertenecer a cultura-friki ha pasado de ser un agravio a representar a todo un fenómeno social en el que las minorías, más respetadas que nunca,  pasean por la calle su derecho a ser diferentes y querer reinventar el mundo. ¿No os suena a neo-generación del 68?  Si es que…, en definitiva, de una manera o de otra, todo vuelve.

Como en casa celebramos el día del orgullo friki por todo lo alto, estuve buscando una manera dulce y divertida de decirle a Óscar lo orgullosa que estoy de él. Tenía el cortapastas perfecto  para la ocasión y lancé una consulta a Twitter. La inspiración apareció poco después de la mano de Pam, de Uno de Dos, uno de mis blogs favoritos. Tengo que deciros que es la primera vez que tengo tanto éxito en el mundo de las galletas. Desde los ingredientes hasta la técnica, esta ha sido mi master class en este género reposteril, que yo la he adaptado a Thermomix, que es mi R2-D2 particular. Os recomiendo a todos que disfrutéis de las Friki-g@lletas y ¡Que la fuerza os acompañe!

Ingredientes:

• 125 gr de azúcar glas tamizado.
• 200 gr de mantequilla en punto pomada.
• 1 huevo.
• 2 cucharaditas de extracto de vainilla.
• 1 cucharada de emulsión de mantequilla y vainilla de Lorann Oils (opcional).
• 1 pizca de sal.
• 400 gr de harina de repostería.

Preparación:

1. Trituramos el azúcar en el vaso a velocidad progresiva 5-10 durante 1 minuto, hasta el punto de azúcar glas.
2. Incorporamos al vaso la mantequilla. Batimos a velocidad 4 durante 30 segundos hasta formar una pasta.
3. Añadimos el huevo y mezclamos 10 segundos más a velocidad 4.
4. Echamos el extracto de vainilla y la emulsión de aroma y mezclamos otros 10 segundos a velocidad 4.
5. A continuación, programamos a velocidad 4 sin tiempo y vamos agregando la harina junto con la sal poco a poco por el bocal. Cuando la terminemos, la masa quedara granulosa. La sacamos del vaso.
6. Ahora trabajaremos la masa en nuestra mesa uniéndola en una bola con un poco más de harina.
7. Dividimos la masa en dos partes y colocamos cada parte entre dos hojas de papel de hornear y la estiramos del grosor que necesitemos (veréis qué fácil se hace de esta manera). Guardamos las dos planchas de masa un mínimo de 3 horas en la nevera.
8. Precalentamos el horno a 180º.
9. Sacamos nuestra masa de la nevera y la cortamos con el cortapastas.  Nos ayudaremos de una espátula para colocar las galletas en una bandeja de horno en la que habremos puesto de soporte el papel de hornear que hemos retirado.
10. Horneamos durante 14 minutos (con calor abajo y aire en mi caso) hasta que los bordes de las galletas estén dorados.
11. Sacamos la bandeja del horno, mantenemos las galletas en la bandeja durante 5 minutos más y las retiramos a una rejilla hasta que se enfríen totalmente. Para utilizarlas debemos esperar unas horas.

Consejos:

• Guardad las galletas en una lata metálica para evitar que se ablanden y pierdan su aroma.
• Si os gusta que tengan un aspecto brillante, podéis pintarlas ligeramente con huevo batido o leche antes de meterlas al horno.